El Convento de San José de las hermanas Carmelitas Descalzas es el 5ª Convento que fundó Santa Teresa de Jesús. Ella vivió en esta casa y estuvo bastante tiempo compartiendo estancias con la Comunidad de Carmelitas Descalzas de Toledo. Sin duda todo un lujo para Toledo poder contar con un espacio privilegiado donde la Santa vivió durante bastante tiempo.
Hoy en día el convento sigue adelante gracias a la fe y el trabajo de 11 hermanas y al buen hacer de la Madre María Rosa, Priora de la Comunidad.
Cuentan con un frondoso jardín, de innumerables árboles frutales, que miman cada día para que sus frutos sean de primera calidad. Unos frutos que las hermanas Carmelitas destinan a la elaboración de una mermelada exquisita y única en Toledo: La Mermelada de la Beata María de Jesús. 100% natural y extremadamente exquisita. Deben probarla.
Para ello, pueden acercarse al Convento, que está en el Casco Antiguo de la Ciudad, muy cerca de la Puerta del Cambrón (bajando de la famosa Iglesia de San Juan de los Reyes). Ahí, podrán acceder al hall del locutorio que tienen preparado con un antiguo torno en donde las monjas podrán servir todas las mermeladas que sean necesarias.
Cuando hicimos las fotografías para poder preparar los perfiles de conventos, nos dieron a probar la mermelada, concretamente la de melocotón, y les aseguramos que es un auténtico “bocatto di Cardinale”. No deben perderse este manjar monacal.
Según la temporada de recolección de los árboles frutales elaboran un tipo de mermelada u otra, pero las más demandadas son:
- Mermelada de melocotón.
- Mermelada de pera.
- Mermelada de fresa.
- Mermelada de naranja.
- Mermelada de ciruela.
- Mermelada de membrillo.
La historia de la Comunidad de Carmelitas Descalzas nos la cuenta Madre María Rosa tras las rejas del locutorio antes de permitirnos pasar a tomar algunas fotografías del obrador. En 1569 fundó Santa Teresa de Jesús la Comunidad de Carmelitas Descalzas en Toledo. En una primera fase, la Comunidad se ubicó en la Judería toledana para pasar después a la calle Núñez de Arce (que antiguamente era la calle de las Carretas). Ahí fue donde Santa Teresa de Jesús tuvo su habitación, que todavía existe.
Años más tarde se marcharon a las Tendillas en otra casa y después compraron la ubicación actual, el Palacio de D. Fernando de la Cerda. Un Palacio que fue visitado por Santa Teresa y en donde hay recuerdos y detalles de su estancia.
Os recomendamos que os paséis por el Convento o que contactéis con ellas para probar sus mermeladas. No tienen desperdicio ninguno.